Corea del Norte volvió a desafiar a la comunidad internacional al lanzar misil
Corea del Norte volvió a desafiar a la comunidad internacional al lanzar el domingo un nuevo misil balístico de largo alcance, el primero desde 2017, que recorrió unos 1.000 kilómetros y cayó en el mar de Japón, según informaron las autoridades militares de Corea del Sur y Japón.
El lanzamiento se produjo horas antes de que el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, y su homólogo japonés, Fumio Kishida, se reunieran en Tokio para tratar de mejorar las tensas relaciones entre ambos países y abordar el tema de la desnuclearización de Corea del Norte.
El misil, identificado como Hwasong-17, es un nuevo tipo de misil balístico intercontinental (ICBM) que puede alcanzar objetivos a más de 10.000 kilómetros de distancia, según afirmó el líder norcoreano, Kim Jong Un, quien supervisó personalmente el lanzamiento.
Kim dijo que el misil era un «poderoso elemento de disuasión de la guerra nuclear» y que las fuerzas norcoreanas estaban «totalmente listas» para una posible confrontación militar con Estados Unidos, al que acusó de mantener una política hostil hacia su país.
El lanzamiento fue condenado por Corea del Sur, Japón y Estados Unidos, que lo calificaron de «provocación» y de «amenaza» para la paz y la seguridad regionales e internacionales. Los tres países pidieron a Corea del Norte que retome el diálogo sobre su programa nuclear y balístico, que ha sido objeto de múltiples sanciones por parte del Consejo de Seguridad de la ONU.
Corea del Norte ha intensificado sus pruebas de armas en los últimos meses, tras un largo periodo de silencio durante la pandemia del coronavirus. Desde septiembre, ha lanzado varios misiles balísticos y de crucero, así como proyectiles hipersónicos.
Los expertos consideran que Corea del Norte busca demostrar su capacidad militar y presionar a Estados Unidos para que le ofrezca concesiones diplomáticas, ante el estancamiento de las negociaciones sobre su desnuclearización desde 2019.
